
Yemen está sufriendo una grave crisis humanitaria. Según informes de la Organización Mundial de la Salud, casi 13 millones de yemeníes están en situación de desamparo y necesitan atención médica con urgencia. También han informado de la situación de más de medio millón de niños menores de cinco años, quienes sufren desnutrición severa con riesgo de muerte.
Casi la mitad de las instalaciones médicas de todo el país están operando parcialmente o están fuera de servicio. Esto es debido a la escasez tanto de personal y medicamentos como de fondos y dinero para pagar la electricidad. Esta situación no ayuda a solventar los brotes de enfermedades como el sarampión, la difteria o el cólera, entre otros. La falta de medios está agravando severamente la crisis de salud en el país.
Aunque la OMS ha podido proporcionar equipos y suministros médicos, gracias también al apoyo de donantes internacionales, estos siguen siendo escasos para la desesperada situación que se está viviendo. A pesar de las ayudas, el sistema de salud está al borde del colapso. La guerra civil asola al país desde 2014, provocando el colapso casi total de su economía. Pero recientes negociaciones han dado la esperanza de que haya un alto al fuego próximamente.