
Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), una de cada 5 personas empleadas sufre violencia y acoso en el trabajo. El acoso que sufren puede ser físico, psicológico o sexual. También se reporta que solo la mitad de las víctimas hablan de sus experiencias con otras personas, y cuando lo hacen, es después de haberlas sufrido de manera repetida.
Según los datos proporcionados, los jóvenes, los trabajadores migrantes, mujeres y hombres asalariados son los que están más expuestos a la violencia. Las mujeres tienen el doble de probabilidad de enfrentarse a violencia y acoso en el trabajo, pero las mujeres migrantes tienen, además, el doble de probabilidades que las no migrantes.
Los trabajadores que han tenido que sufrir violencia y acoso no lo sufren una sola vez, sino múltiples veces durante su vida laboral, denuncia la organización. La forma más común de acoso en todos los países es el psicológico, pero además de esto, las mujeres también están más expuestas al acoso sexual. Según la OIT, queda mucho trabajo por delante para acabar con todas las formas de violencia y acoso en el trabajo. Piden mayor colaboración de gobiernos y organizaciones para proteger a aquellos empleados más vulnerables.