Imagina poder observar de manera visual a través de un mapa cómo afectará el cambio climático a las Islas y cómo puede servirnos para intentar reducir los efectos lo máximo posible, los aprendizajes que se fomentarían, la unión y el apoyo como sociedad.
Esto es lo que se quiere llevar a cabo a través del Proyecto PIMA Adapta Costas de Canarias el cual cuenta con un índice sintético que refleja el impacto de la subida del nivel del mar y las tormentas en cada localidad de los archipiélagos. Por supuesto, nos confirman que los resultados muestran que la dependencia del turismo es culpable de que algunas regiones estén más expuestas que otras.
Datos recientes difundidos por el Gobierno regional revelan que municipios como Pájara, en Fuerteventura, o Haría, en Lanzarote, serán los que sufrirán más los efectos del calentamiento global en sus costas.
A continuación, se muestra el mapa que se ha elaborado por el Gobierno de Canarias. En él se reflejan los datos de un índice sintético de riesgo. Los autores agruparon varias consecuencias del cambio climático en las costas como puede ser el aumento del nivel del mar, la erosión, inundaciones y la posible exposición de cada municipio en un solo indicador que recoge el menor riesgo posible (valor 0) y el mayor (1). En 2100, se prevé que el escenario podría ser el que se observa en la imagen.
El geógrafo de la ULL remarca que: “El principal objetivo de la adaptación frente al cambio climático es reducir las vulnerabilidades. Y esto solo es posible con estudios de detalle”.
Además de estudios, sería ideal una responsabilidad y acción real, reformular las leyes de tal manera que se nos “obligue un poco” a cumplir con el cuidado del medioambiente, pues somos responsables de su decadencia y no hay retorno posible una vez esté todo perdido…
