El cortisol es conocido como la hormona del estrés. Por un lado, es necesaria para hacer frente a diversos retos de la vida y situaciones en las que debemos estar en alerta. Pero, por otro, tener el cortisol elevado durante largos periodos de tiempo puede afectar negativamente a tu salud.
Aunque ayuda a controlar los niveles en sangre, las respuestas del sistema inmune y la tensión arterial, también puede causar estragos en tu cuerpo. Por ejemplo, puede hacerte ganar peso, afectar a tu memoria, provocar enfermedades cardiovasculares y causar ansiedad.
El cortisol puede incrementarse por muchos motivos. Por depresión, obesidad, enfermedades del riñón o el hígado, un ejercicio aeróbico muy intenso e incluso por un embarazo. Si crees que por alguna de estas razones tu cortisol puede estar alto y tienes algún síntoma, consulta con tu médico para encontrar el tratamiento más adecuado.
