El pueblo francés se ha echado a la calle para protestar sobre las reformas de las pensiones que tiene pensada el gobierno de Macron. En esta tercera movilización han sido casi dos millones los que han salido a la calle a movilizarse de la huelga contra la reforma. Esta gran participación que paraliza Francia se debe a que los 5 principales sindicatos del país han unido fuerzas.
Las cifras tienen un arco considerable según la fuente. El Ministerio del Interior cifra la manifestación en 615.000 personas mientras que el sindicato de la Confederación General del Trabajo (CGT) lo hace en 1,8 millones. Aumentarían con respecto al segundo día en 300.000 personas según el sindicato, pero descendería menos de 200.000 personas según fuentes oficiales del gobierno.
“Queremos reformar el sistema de pensiones para crear un sistema universal. Esto implica la desaparición de los regímenes especiales. Mi determinación y la del Gobierno en este proyecto es total”, ha afirmado el primer ministro francés. Por su parte, el líder del sindicato de la CGT asegura que “el Gobierno es el que puede decir vale, hemos escuchado a la calle y paramos el proyecto de ley».
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