La ONG Amnistía Internacional ha publicado un informe para denunciar el daño ocasionado por las balas de goma. También piden que se apliquen medidas más estrictas para su uso, además de que se formalice un tratado global que regule el comercio de este material. La ONG denuncia e insiste en la falta de legislación internacional y pide que se limite el uso de estas balas a actos violentos y no a movimientos pacíficos de protesta.
El uso de balas de goma y plástico ha sido ampliamente usado por la policía en protestas, resultando en casi dos mil personas heridas y causando la muerte de 53. El informe, titulado “Me estalló el ojo”, ha recabado información de más de 30 países durante cinco años. En el caso de España, han sido 24 las personas heridas y 1 fallecido, Íñigo Cabacas, que murió por un traumatismo craneal.
Otro de los casos reflejado en el informe es el de África, una chica que participó en unas protestas en Barcelona en 2021 y que con solo 19 años perdió un ojo tras recibir el impacto de una bala de goma. La joven no solo tuvo que sufrir la pérdida de su ojo, sino que a día de hoy sufre de secuelas y miedo a cualquier sonido fuerte. Su vida ha cambiado para siempre y lo que intenta la ONG es que los gobiernos mundiales tomen acciones lo antes posible, para que nadie más tenga que sufrir ni morir.
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